Villalar is cool again: la mecha que necesitaba ser prendida en nuestra tierra
Para que Castilla y León despunte como una tierra llena de juventud orgullosa de sus raíces, que las toma y las resignifica. Al final Castilla y León está como estamos todas: harta. Pero no por eso va a dejar de ser una tía chulísima, así que se va a bailar una jota y va a echar un trago de la bota de vino.